Un encuentro encadenado entre cóctel, y paseo, y pre-proyección y proyección y post-proyección. Un diálogo inteligente con gente que te gusta. Gente que quieres y que empiezas a querer porque te gusta.
Recordadme, como yo me recordaré, que el sábado 20 de septiembre, a las puertas del otoño, fui feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario