Tomo café con un amigo que me reprocha la forma en que colgué en el blog a mis trofeos de fin de verano. El comentario me sirve para reflexionar sobre la libertad de expresión, incluso en los blogs. Hasta qué punto somos libres para hacer de nuestra capa un sayo, y hasta qué punto estamos condicionados para expresarnos libremente incluso en un territorio que es nuestro. Y a fe que el del blog debe serlo, o de lo contrario qué pena. Para qué tantos medios.
Sé que la libertad de una persona termina donde se inicia la de otra. Hasta ahí llego. Sin embargo, este tipo de colisiones suceden. Vuelvo a los trofeos. Qué culpa tengo yo que me gusten los chicos guapos, talentosos y nobles. Lo que para mí es un homenaje para otros puede ser una vejación. Cosificar las personas. Convertir al hombre en objeto.
En qué paradoja me muevo. Traté de halagar a los que más felices me hicieron, colocándoles en el cuadro de honor. Seleccioné precisamente a aquellos con los que quiero una relación perdurable. Cuando en realidad parece que estaba jugando con fuego, y que el hecho de convertirles en trofeo de verano era motivo más que suficiente para que alguno dejara de hablarme.
Ahora que mi amigo me ha hecho recapacitar, creo que demasiado buenos han sido conmigo. Demasiado me aguantan. Ninguno se ha quejado por estar ahí. Ninguno se ha quejado por haber aparecido en el ranking. E incluso los amigos cómplices que han participado en el jurado lo han hecho con el buen humor que les caracteriza. Por cierto, que el ganador fue Cristian Moure, de Vitoria.
Esto es un blog personal. Un diario. Una página cordial. Un motivo para la sonrisa. Una prueba para demostraros en la distancia que sigo estando vivo.
Y un cuaderno de verano que durante dos semanas se reconvierte en una ventana abierta desde el Festival de San Sebastián. Que nadie se incomode, por favor.
Y que vengan más trofeos...
martes, 16 de septiembre de 2008
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Quienes te conocemos, creo que te entendemos, y a lo mejor incluso no tanto como tú nos entiendes y nos ves venir.
ResponderEliminarY quien se pueda incomodar, que se desincomode, que es gratis.
Éste es cada vez un país más absurdo. Que Belén Esteban sea la reina mediàtica, que otros degenerados claven lanzas a un toro (que no sabe qué hace allí ni por qué) o que Rodríguez de Santos (Ex-edil Ayto. Palma de Mallorca, del PP) "presuntamente" hiciera todo lo que hizo defendiendo luego todo lo contrario (tachando de enfermos a los homosexuales) desde las filas del PP...
En fin, Antonio, que ya espero saber del Festival y mucho más.
PD:(Has tenido guardada esa foto con Silvestre un año sin decirme nada??? No te perdono!! Hay que compartir!!;-)